¿Cuáles son las vacunas obligatorias en Guatemala y cuándo deben aplicarse?

AME3369. RÍO DE JANEIRO (BRASIL), 15/07/2022.- Una trabajadora de la salud aplica a un niño una dosis de vacuna contra la covid-19 durante una jornada de vacunación a niños, hoy, en el Centro Municipal de Salud Píndaro de Carvalho Rodrigues, en Río de Janeiro (Brasil). Río es la primera capital del país en aplicar la vacuna anticovid a niños de 3 y 4 años. EFE/ André Coelho

Salud y Familia

¿Cuáles son las vacunas obligatorias en Guatemala y cuándo deben aplicarse?

La Organización Mundial de la Salud calcula que los esfuerzos mundiales de inmunización han salvado 154 millones de vidas, es decir, seis vidas cada minuto. Conozca cuáles son las vacunas obligatorias y en qué edades deben aplicarse.

AME3369. RÍO DE JANEIRO (BRASIL), 15/07/2022.- Una trabajadora de la salud aplica a un niño una dosis de vacuna contra la covid-19 durante una jornada de vacunación a niños, hoy, en el Centro Municipal de Salud Píndaro de Carvalho Rodrigues, en Río de Janeiro (Brasil). Río es la primera capital del país en aplicar la vacuna anticovid a niños de 3 y 4 años. EFE/ André Coelho

Una trabajadora de la salud aplica a un niño una dosis de vacuna como medida de protección a su salud. (Foto Prensa Libre: EFE)


Foto:

Después de la potabilización del agua, la vacunación es reconocida como la acción de salud pública que más ha reducido el impacto de las enfermedades infecciosas transmisibles y ha mejorado la calidad de vida de la población mundial. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), las vacunas previenen entre 3.5 y 5 millones de muertes cada año por enfermedades como gripe, sarampión y tétanos.

En general, la población cree en el valor social de las vacunas porque observa una disminución de los casos de las enfermedades que previenen. Sin embargo, cuando se registran pocos casos debido a la vacunación continua, puede surgir incertidumbre o incluso duda. Por ello, es importante que las personas conozcan los beneficios de la vacunación y su aporte a la sociedad en los ámbitos personal, familiar, económico y de salud pública, señala un documento de Pfizer.

La vacunación protege frente a padecimientos graves, complicaciones e incluso la muerte ocasionada por diversas enfermedades. Es decir, las vacunas marcan la diferencia y salvan vidas.

Aunque la mayor parte del esquema de vacunación se cumple durante la niñez, los adolescentes y adultos también necesitan reforzar sus defensas con vacunas específicas. El Departamento de Medicina Preventiva del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), subraya en una entrevista con Prensa Libre que completar los esquemas de vacunación en todas las edades no solo es importante, sino urgente. La protección contra enfermedades prevenibles debe mantenerse a lo largo de toda la vida.

 ¿Por qué es importante seguir el esquema de vacunación?

Desde el nacimiento hasta la vida adulta es posible contar con un calendario de vacunación. La vacunación es efectiva, salva vidas, refuerza el sistema inmunológico y ayuda a combatir muchas enfermedades que pueden causar la muerte o dejar secuelas graves. Si no nos vacunamos, corremos el riesgo de que reaparezcan enfermedades graves y mortales que ya han sido controladas.

Beltetón refiere que existe un grado de conciencia en la población sobre la necesidad de reiniciar los esquemas de vacunación, debido a que se ha notado un incremento de enfermedades tras la suspensión de vacunaciones durante la pandemia. Entre estas, menciona la aparición de casos aislados de sarampión en otras latitudes, así como una tendencia al alza de tosferina y casos de influenza: “Esta última hemos visto que se está desbordando precisamente en estas épocas”.

 Vacunas obligatorias para niños en Guatemala

Un esquema de vacunación es un listado que incluye todas las vacunas necesarias según la edad de las personas e indica el momento y el orden en que deben administrarse. Es elaborado por una entidad o institución de salud.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda incluir vacunas contra tuberculosis, hepatitis A y B, poliomielitis, tétanos, difteria, tosferina, influenza, Haemophilus influenzae, neumococo, rotavirus, sarampión, paperas, rubéola, virus del papiloma humano, fiebre amarilla, meningococo y varicela.

Aunque se promueve que los niños reciban todas las vacunas necesarias, es importante que los adultos también completen su esquema de inmunización.

Primer año de vida, etapa preescolar y escolar

Beltetón refiere: “Se tiene el mito de que cuando los niños están enfermos de alguna enfermedad respiratoria no es posible vacunarlos. Por el contrario, en el momento en que los niños llegan a consulta es posible aprovechar para que sean vacunados”, agrega.

La vacunación comienza desde el nacimiento. A más tardar, a las 12 horas se administra la vacuna contra la hepatitis B y la BCG, que protege contra formas graves de tuberculosis. El siguiente contacto será a los dos, cuatro y seis meses, con una serie primaria que incluye la vacuna contra neumococo y la pentavalente, que protege contra tosferina, poliomielitis, difteria, tétanos e Haemophilus influenzae tipo B. Entre las vacunas de esta etapa también se encuentra la de rotavirus, por mencionar las principales.

Todas las dosis de vacunas generan anticuerpos, pero estos disminuyen con el tiempo. Por ello, algunas vacunas requieren refuerzos mientras los niños crecen: a partir del año para neumococo y desde los 18 meses para otras enfermedades como tétanos y tosferina.

Primer año de vida Etapa preescolar Edad escolar
BCG Varicela Varicela
Hepatitis B Hepatitis A  
Pentavalente ( Difteria, Tetanos, TosFerina,Tetanos, Hepatitis B, Haemophilus Influenzae)    
Neumococo    
Rotavirus    
Antipoliomelitica    
Sarampión Rubeola, Paperas    
DPT (Difteria, Tetanos, TosFerina)    
Influenza a partir de los 6 meses

(Fuente: IGSS)

¿Qué vacunas deben recibir los adolescentes?

El pediatra Beltetón explica que en el grupo de adolescentes se podría dividir de los de los preadolescentes hasta la etapa del adulto de los 11 años, 13 a 15 años, 16 años hasta los 18.

Las vacunas recomendadas son la vacuna de tosferina, difteria y tétanos que es posible poner a partir de los siete años de edad. Es una sola dosis en este grupo de población. que es un refuerzo especialmente para protegerlos.

La vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH) es sumamente importante para los adolescentes que están entrando en la etapa previa al inicio de la actividad sexual. Es fundamental que tanto hombres como mujeres reciban esta vacuna, ya que protege contra infecciones que pueden derivar en cánceres genitales, entre otros problemas de salud.

Otra vacuna clave en este grupo de edad es la del meningococo. El meningococo es una bacteria que se transmite fácilmente entre adolescentes que conviven de forma cercana, como en fiestas, clubes, aulas escolares e incluso en internados donde comparten dormitorios. Esta cercanía los hace mucho más vulnerables al contagio, dice Beltetón. Se trata de una población altamente expuesta, ya que esta bacteria puede causar meningitis, una enfermedad potencialmente mortal si no se diagnostica y trata a tiempo.

La vacuna contra la influenza también debe aplicarse anualmente en esta etapa de la vida. Es una vacuna prioritaria, especialmente para adolescentes que tienen alguna condición respiratoria previa.

Además, la vacuna contra la neumonía, causada por el neumococo, también cobra relevancia. Aunque se aplica desde los primeros meses de vida (a los 2, 4, 6 y 18 meses), en los preadolescentes y adolescentes debe administrarse un refuerzo. Actualmente en el país está disponible la vacuna neumocócica quincevalente, y próximamente se contará con la versión veintevalente.

Vacunas para adultos

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, CDC, en Estados Unidos recomiendan vacunas para adultos en función de su edad, vacunas anteriores, estado de salud, estilo de vida, ocupación, destinos de viaje y actividad sexual.

Consulte con su médico para que le oriente mejor sobre las vacunas a recibir durante el año o cada cuánto tiempo debe hacerlo.

Entre las más recomendadas están las vacunas de la influenza, la hepatitis B, Vacuna antineumocócica y la de tétanos, difteria y tosferina. Esta última también se recomienda durante cada embarazo, preferentemente entre las semanas 27 y 36 de gestación.

 ¿Qué pasa si alguien no está al día con sus vacunas?

Vacunarse es responsabilidad de todos. Es importante recibir las vacunas necesarias de forma puntual y todas las veces que sea preciso. Cuando nos vacunamos, protegemos nuestra salud y la de quienes nos rodean; velamos por el bien común, explica el IGSS.

En la práctica diaria, con cierta frecuencia se atiende a niños, adolescentes y adultos que no han seguido correctamente el calendario de inmunizaciones establecido a nivel local. Algunos lo han iniciado tarde, otros lo han interrumpido y, en menor medida, hay quienes nunca se han inmunizado.

También es cada vez más común atender a pacientes inmigrantes que han perdido su tarjeta de vacunación o poseen documentos de inmunización dudosos o inexistentes.

Toda persona, sin importar la edad, que tenga un esquema de vacunación incompleto, que se sospeche que nunca ha recibido dosis o que no pueda demostrar su estado actual de inmunización, puede recibir las dosis pendientes mediante lo que se conoce como esquema de vacunación acelerado o de rescate, también llamado puesta al día en vacunas.

Beltetón agrega que el no aplicar vacunas como la del sarampión, rubéola y paperas está generando un riesgo creciente. Por cada grupo que no se vacuna, aumenta la posibilidad de que personas no inmunizadas se enfermen de sarampión. “Nosotros vivimos, durante nuestros años de formación médica, la catástrofe que representaron las epidemias de sarampión en el país”, reconoce el pediatra.

Si llegáramos a enfrentar una nueva epidemia de sarampión en Guatemala, miles de niños podrían morir, especialmente aquellos que están en condiciones de desnutrición, ya que son altamente vulnerables. Beltetón agrega que las complicaciones más frecuentes del sarampión son la neumonía, en primer lugar, y en segundo, las lesiones neurológicas como la encefalitis.

“Nos tocó vivir esas tragedias y no queremos que se repitan. Gracias a la vacunación, logramos erradicar esa enfermedad del país”, reflexiona.

Sin embargo, el galeno también reconoce que en algunos países se han tergiversado los beneficios de las vacunas, aduciendo falsamente que causan problemas como el autismo. Hasta la fecha, no existe ninguna comprobación científica que respalde esa afirmación.

“Es un grave error darle la espalda a la ciencia y dejar de vacunar a nuestras poblaciones, sobre todo cuando las evidencias científicas muestran con claridad la efectividad y seguridad de las vacunas”, comenta Beltetón.

¿Dónde vacunarse en Guatemala? Lugares y opciones gratuitas

En Guatemala es posible vacunarse de manera gratuita en los servicios del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, centros de salud, jornadas de salud, Centros de Atención Permanente y Centros de Atención Integral Materno Infantil, así como en las unidades médicas y consultorios del IGSS.

En el sistema médico privado también es posible solicitar apoyo y adquirir vacunas con una inversión económica.

En cada uno de estos lugares, las personas pueden recibir asesoría sobre cómo llevar su control y reforzar sus esquemas personales de inmunización.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce que existen vacunas para prevenir más de 30 enfermedades e infecciones potencialmente letales, lo que permite a personas de todas las edades vivir más tiempo y con mejor salud. En la actualidad, la inmunización evita entre 3.5 y 5 millones de muertes cada año por enfermedades como difteria, tétanos, tosferina, gripe y sarampión.

La inmunización es clave para la atención primaria de salud. Además, es un derecho humano indiscutible y una de las mejores inversiones en salud que el dinero puede financiar.

 La Organización Mundial de la Salud calcula que los esfuerzos mundiales de inmunización han salvado 154 millones de vidas, es decir, seis vidas cada minuto. Conozca cuáles son las vacunas obligatorias y en qué edades deben aplicarse.  

Salud y Familia

¿Cuáles son las vacunas obligatorias en Guatemala y cuándo deben aplicarse?

La Organización Mundial de la Salud calcula que los esfuerzos mundiales de inmunización han salvado 154 millones de vidas, es decir, seis vidas cada minuto. Conozca cuáles son las vacunas obligatorias y en qué edades deben aplicarse.

AME3369. RÍO DE JANEIRO (BRASIL), 15/07/2022.- Una trabajadora de la salud aplica a un niño una dosis de vacuna contra la covid-19 durante una jornada de vacunación a niños, hoy, en el Centro Municipal de Salud Píndaro de Carvalho Rodrigues, en Río de Janeiro (Brasil). Río es la primera capital del país en aplicar la vacuna anticovid a niños de 3 y 4 años. EFE/ André Coelho

Una trabajadora de la salud aplica a un niño una dosis de vacuna como medida de protección a su salud. (Foto Prensa Libre: EFE)

Después de la potabilización del agua, la vacunación es reconocida como la acción de salud pública que más ha reducido el impacto de las enfermedades infecciosas transmisibles y ha mejorado la calidad de vida de la población mundial. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), las vacunas previenen entre 3.5 y 5 millones de muertes cada año por enfermedades como gripe, sarampión y tétanos.

En general, la población cree en el valor social de las vacunas porque observa una disminución de los casos de las enfermedades que previenen. Sin embargo, cuando se registran pocos casos debido a la vacunación continua, puede surgir incertidumbre o incluso duda. Por ello, es importante que las personas conozcan los beneficios de la vacunación y su aporte a la sociedad en los ámbitos personal, familiar, económico y de salud pública, señala un documento de Pfizer.

La vacunación protege frente a padecimientos graves, complicaciones e incluso la muerte ocasionada por diversas enfermedades. Es decir, las vacunas marcan la diferencia y salvan vidas.

Aunque la mayor parte del esquema de vacunación se cumple durante la niñez, los adolescentes y adultos también necesitan reforzar sus defensas con vacunas específicas. El Departamento de Medicina Preventiva del Instituto Guatemalteco de Seguridad Social (IGSS), subraya en una entrevista con Prensa Libre que completar los esquemas de vacunación en todas las edades no solo es importante, sino urgente. La protección contra enfermedades prevenibles debe mantenerse a lo largo de toda la vida.

 ¿Por qué es importante seguir el esquema de vacunación?

Desde el nacimiento hasta la vida adulta es posible contar con un calendario de vacunación. La vacunación es efectiva, salva vidas, refuerza el sistema inmunológico y ayuda a combatir muchas enfermedades que pueden causar la muerte o dejar secuelas graves. Si no nos vacunamos, corremos el riesgo de que reaparezcan enfermedades graves y mortales que ya han sido controladas.

Beltetón refiere que existe un grado de conciencia en la población sobre la necesidad de reiniciar los esquemas de vacunación, debido a que se ha notado un incremento de enfermedades tras la suspensión de vacunaciones durante la pandemia. Entre estas, menciona la aparición de casos aislados de sarampión en otras latitudes, así como una tendencia al alza de tosferina y casos de influenza: “Esta última hemos visto que se está desbordando precisamente en estas épocas”.

 Vacunas obligatorias para niños en Guatemala

Un esquema de vacunación es un listado que incluye todas las vacunas necesarias según la edad de las personas e indica el momento y el orden en que deben administrarse. Es elaborado por una entidad o institución de salud.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda incluir vacunas contra tuberculosis, hepatitis A y B, poliomielitis, tétanos, difteria, tosferina, influenza, Haemophilus influenzae, neumococo, rotavirus, sarampión, paperas, rubéola, virus del papiloma humano, fiebre amarilla, meningococo y varicela.

Aunque se promueve que los niños reciban todas las vacunas necesarias, es importante que los adultos también completen su esquema de inmunización.

Primer año de vida, etapa preescolar y escolar

Beltetón refiere: “Se tiene el mito de que cuando los niños están enfermos de alguna enfermedad respiratoria no es posible vacunarlos. Por el contrario, en el momento en que los niños llegan a consulta es posible aprovechar para que sean vacunados”, agrega.

La vacunación comienza desde el nacimiento. A más tardar, a las 12 horas se administra la vacuna contra la hepatitis B y la BCG, que protege contra formas graves de tuberculosis. El siguiente contacto será a los dos, cuatro y seis meses, con una serie primaria que incluye la vacuna contra neumococo y la pentavalente, que protege contra tosferina, poliomielitis, difteria, tétanos e Haemophilus influenzae tipo B. Entre las vacunas de esta etapa también se encuentra la de rotavirus, por mencionar las principales.

Todas las dosis de vacunas generan anticuerpos, pero estos disminuyen con el tiempo. Por ello, algunas vacunas requieren refuerzos mientras los niños crecen: a partir del año para neumococo y desde los 18 meses para otras enfermedades como tétanos y tosferina.

Primer año de vida Etapa preescolar Edad escolar
BCG Varicela Varicela
Hepatitis B Hepatitis A
Pentavalente ( Difteria, Tetanos, TosFerina,Tetanos, Hepatitis B, Haemophilus Influenzae)
Neumococo
Rotavirus
Antipoliomelitica
Sarampión Rubeola, Paperas
DPT (Difteria, Tetanos, TosFerina)
Influenza a partir de los 6 meses

(Fuente: IGSS)

¿Qué vacunas deben recibir los adolescentes?

El pediatra Beltetón explica que en el grupo de adolescentes se podría dividir de los de los preadolescentes hasta la etapa del adulto de los 11 años, 13 a 15 años, 16 años hasta los 18.

Las vacunas recomendadas son la vacuna de tosferina, difteria y tétanos que es posible poner a partir de los siete años de edad. Es una sola dosis en este grupo de población. que es un refuerzo especialmente para protegerlos.

La vacuna contra el virus del papiloma humano (VPH) es sumamente importante para los adolescentes que están entrando en la etapa previa al inicio de la actividad sexual. Es fundamental que tanto hombres como mujeres reciban esta vacuna, ya que protege contra infecciones que pueden derivar en cánceres genitales, entre otros problemas de salud.

Otra vacuna clave en este grupo de edad es la del meningococo. El meningococo es una bacteria que se transmite fácilmente entre adolescentes que conviven de forma cercana, como en fiestas, clubes, aulas escolares e incluso en internados donde comparten dormitorios. Esta cercanía los hace mucho más vulnerables al contagio, dice Beltetón. Se trata de una población altamente expuesta, ya que esta bacteria puede causar meningitis, una enfermedad potencialmente mortal si no se diagnostica y trata a tiempo.

La vacuna contra la influenza también debe aplicarse anualmente en esta etapa de la vida. Es una vacuna prioritaria, especialmente para adolescentes que tienen alguna condición respiratoria previa.

Además, la vacuna contra la neumonía, causada por el neumococo, también cobra relevancia. Aunque se aplica desde los primeros meses de vida (a los 2, 4, 6 y 18 meses), en los preadolescentes y adolescentes debe administrarse un refuerzo. Actualmente en el país está disponible la vacuna neumocócica quincevalente, y próximamente se contará con la versión veintevalente.

Vacunas para adultos

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, CDC, en Estados Unidos recomiendan vacunas para adultos en función de su edad, vacunas anteriores, estado de salud, estilo de vida, ocupación, destinos de viaje y actividad sexual.

Consulte con su médico para que le oriente mejor sobre las vacunas a recibir durante el año o cada cuánto tiempo debe hacerlo.

Entre las más recomendadas están las vacunas de la influenza, la hepatitis B, Vacuna antineumocócica y la de tétanos, difteria y tosferina. Esta última también se recomienda durante cada embarazo, preferentemente entre las semanas 27 y 36 de gestación.

 ¿Qué pasa si alguien no está al día con sus vacunas?

Vacunarse es responsabilidad de todos. Es importante recibir las vacunas necesarias de forma puntual y todas las veces que sea preciso. Cuando nos vacunamos, protegemos nuestra salud y la de quienes nos rodean; velamos por el bien común, explica el IGSS.

En la práctica diaria, con cierta frecuencia se atiende a niños, adolescentes y adultos que no han seguido correctamente el calendario de inmunizaciones establecido a nivel local. Algunos lo han iniciado tarde, otros lo han interrumpido y, en menor medida, hay quienes nunca se han inmunizado.

También es cada vez más común atender a pacientes inmigrantes que han perdido su tarjeta de vacunación o poseen documentos de inmunización dudosos o inexistentes.

Toda persona, sin importar la edad, que tenga un esquema de vacunación incompleto, que se sospeche que nunca ha recibido dosis o que no pueda demostrar su estado actual de inmunización, puede recibir las dosis pendientes mediante lo que se conoce como esquema de vacunación acelerado o de rescate, también llamado puesta al día en vacunas.

Beltetón agrega que el no aplicar vacunas como la del sarampión, rubéola y paperas está generando un riesgo creciente. Por cada grupo que no se vacuna, aumenta la posibilidad de que personas no inmunizadas se enfermen de sarampión. «Nosotros vivimos, durante nuestros años de formación médica, la catástrofe que representaron las epidemias de sarampión en el país», reconoce el pediatra.

Si llegáramos a enfrentar una nueva epidemia de sarampión en Guatemala, miles de niños podrían morir, especialmente aquellos que están en condiciones de desnutrición, ya que son altamente vulnerables. Beltetón agrega que las complicaciones más frecuentes del sarampión son la neumonía, en primer lugar, y en segundo, las lesiones neurológicas como la encefalitis.

«Nos tocó vivir esas tragedias y no queremos que se repitan. Gracias a la vacunación, logramos erradicar esa enfermedad del país», reflexiona.

Sin embargo, el galeno también reconoce que en algunos países se han tergiversado los beneficios de las vacunas, aduciendo falsamente que causan problemas como el autismo. Hasta la fecha, no existe ninguna comprobación científica que respalde esa afirmación.

«Es un grave error darle la espalda a la ciencia y dejar de vacunar a nuestras poblaciones, sobre todo cuando las evidencias científicas muestran con claridad la efectividad y seguridad de las vacunas», comenta Beltetón.

¿Dónde vacunarse en Guatemala? Lugares y opciones gratuitas

En Guatemala es posible vacunarse de manera gratuita en los servicios del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, centros de salud, jornadas de salud, Centros de Atención Permanente y Centros de Atención Integral Materno Infantil, así como en las unidades médicas y consultorios del IGSS.

En el sistema médico privado también es posible solicitar apoyo y adquirir vacunas con una inversión económica.

En cada uno de estos lugares, las personas pueden recibir asesoría sobre cómo llevar su control y reforzar sus esquemas personales de inmunización.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) reconoce que existen vacunas para prevenir más de 30 enfermedades e infecciones potencialmente letales, lo que permite a personas de todas las edades vivir más tiempo y con mejor salud. En la actualidad, la inmunización evita entre 3.5 y 5 millones de muertes cada año por enfermedades como difteria, tétanos, tosferina, gripe y sarampión.

La inmunización es clave para la atención primaria de salud. Además, es un derecho humano indiscutible y una de las mejores inversiones en salud que el dinero puede financiar.

ESCRITO POR:
Ingrid Reyes
Periodista de Prensa Libre especializada en periodismo de bienestar y cultura, con 18 años de experiencia. Premio Periodista Cultural 2023 por el Seminario de Cultura Mexicana y premio ESET región centroamericana al Periodismo en Seguridad Informática 2021.

ARCHIVADO EN:

 Prensa Libre | Vida 

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