Los bajos precios de Temu y Shein podrían cambiar en Guatemala por varios factores: estas son las recomendaciones
Los paquetes procedentes de China, en especial aquellos que ofrecen productos baratos de los gigantes del comercio electrónico Shein y Temu, se verán afectados por aranceles punitivos en EE. UU. a partir del 2 de mayo.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó el decreto para cobro de aranceles a productos menores de US$800 provenientes de China el 2 de abril del 2025 y estableció que el fin de esa exención comenzó el 2 de mayo. (Foto, Prensa Libre: Shutterstock).
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En el marco de un conflicto comercial global, Estados Unidos decidió poner fin a una exención arancelaria para paquetes procedentes de China y Hong Kong con un valor de hasta US$800, un mecanismo que ha permitido la expansión de los gigantes chinos del comercio electrónico en Estados Unidos, como Temu y Shein.
En opinión de Mario Porres, fundador y gerente de la plataforma de comercio electrónico GuatemalaDigital.com, los aranceles de Trump se reflejan en escasez y en el aumento de precios en muchos de los productos que el país importa a través de paquetería.
Por ejemplo, explicó que esta industria en Guatemala opera, en su mayoría, importando desde EE. UU. mercadería producida en China, por lo que los costos de aranceles que ellos pagan en las importaciones desde el país asiático son trasladados al cliente final.
Porres agregó que esta medida aplica a Guatemala al igual que a cualquier país del mundo, pero China es el principal afectado por la cantidad que exporta a EE. UU. en esa modalidad.
Por lo anterior, al consumidor en Guatemala le afecta no tener los mismos precios bajos que antes ofrecían Temu y Shein, ya que al pagar más impuestos en EE. UU., estos costos son trasladados al consumidor guatemalteco.
“Acá será interesante ver cómo evolucionan los intentos de Temu por incursionar en Guatemala, donde, a diferencia de EE. UU., no hay incentivos fiscales por traer menos de US$800 por paquete ni existe una paquetería barata desde China”, enfatizó Porres.
Jacobo Pérez, consultor de comercio electrónico y comunicación, consideró que la eliminación de esa exoneración hace que cualquier envío, por pequeño que sea, incurra en aranceles, y ese sobrecosto se ha trasladado inevitablemente a los guatemaltecos.
Esto va a afectar tanto a los consumidores individuales que pagan el precio de venta como a los revendedores locales que dependen de esos productos. “Esta medida afectará a esas pequeñas empresas que están trayendo productos de China, en este caso productos de varios lugares”, refirió Pérez.
Dos escenarios
Byron Ardón, gerente general de Codecominter, expone que, en términos prácticos, la orden ejecutiva firmada por el presidente Trump no deja claro si la suspensión de la exención para la paquetería inferior a los US$800 aplica a todo el mundo o si es exclusiva para China, Hong Kong o Asia. Si los aranceles quedan sin exención para todo el mundo, estos se aplicarán a los envíos que lleguen de cualquier país.
Consultado sobre el escenario en que la aplicación del arancel sea solo para los envíos desde China, y el comprador esté en Guatemala, dijo que hay dos escenarios. Además, se debe tomar en cuenta que para las importaciones de China a Estados Unidos los aranceles son del 145%.
CONTENIDO PARA SUSCRIPTORES
El primer escenario se refiere a que la mercancía venga de China, entre y se nacionalice en Estados Unidos, porque, por ejemplo, tenía que pasar por algún tipo de proceso antes de ser despachada a Guatemala.
En este caso, el importador en Estados Unidos tendrá que pagar el arancel que le aplique el gobierno para ingresar a ese país, y por defecto, ese cargo se agregará al precio del producto, por lo que este tendrá un valor más alto para traerlo a Guatemala; es decir, si antes lo compraba a cierto valor, ahora lo adquirirá con 145% más.
El segundo escenario ocurre si la mercancía entra en un área de zona libre o zona franca en Estados Unidos, lo que permite que el producto entre en tránsito aduanero y no pague impuestos de importación en ese país. Podría ser que entre en un régimen impositivo especial para que ahí sea procesado y luego despachado hacia donde se desee. En este caso, el producto mantendría su precio como si hubiera sido comprado en Europa, Asia u otro origen.
Al consumidor le conviene comprar directamente de China a través de las páginas o plataformas disponibles. Puede ser que el inventario esté en una zona franca o se lo despachen directamente desde China, y de esta manera consiga el mejor precio.
Porque, insistió, si fue nacionalizado en Estados Unidos y luego se despacha a Guatemala u otros países, el valor del producto ya incluirá el nuevo impuesto de arancel a China.
Analizar centros de distribución
El consumidor debe tomar en cuenta el origen de la compra, es decir, identificar desde dónde conviene más adquirir el producto.
Explica, por ejemplo, que en las plataformas de compra (como Temu o Shein) el consumidor puede observar de dónde vendrá o desde dónde será despachado el producto, también considerando la región.
En las plataformas se establecen los centros de distribución por regiones. Por ejemplo, en el caso de Temu, el centro que cubre a Guatemala es específicamente el de la región de México. También tiene otro establecido en América del Sur.
Explica, además, que desde México se distribuye hacia Centroamérica y, muchas veces, desde México hacia Estados Unidos, aunque Temu tenga su propio centro de distribución en ese país norteamericano.
Respecto a los productos que se traen de China, que pasen por Estados Unidos y que puedan tener agregado el arancel, considera que los más susceptibles son los electrónicos. Entre estos: teléfonos móviles, pantallas táctiles, tabletas, pantallas de televisión, radios, principalmente fabricados en ese país asiático para empresas estadounidenses; también hay otras europeas que mantienen mucho inventario en Estados Unidos.
Si un inventario ya está nacionalizado por los requerimientos mínimos del gobierno estadounidense, este tipo de productos es más susceptible de pasar por el territorio estadounidense y podría verse más impactado en cuanto al precio.
También resalta que algunas empresas usan como centro de acogida o distribución a Panamá, y desde ahí distribuyen a la cadena logística, aunque por ahora sea para negocios mayoristas. Pero cree que podrían buscar instalarse en esos lugares también para ventas minoristas.
“Porque al darse esta situación, en la que Estados Unidos está complicando y poniendo tantas barreras al comercio electrónico internacional, y era usado como centro de acopio y distribución, pueden pensar en otras áreas como Panamá, que cuenta con una zona libre, con leyes más flexibles y que puede servir para distribuir desde ahí. También está México”, agregó.
“Esa es otra tendencia que podremos estar viendo muy pronto: el cambio de los centros de acogida de estas grandes empresas de comercio electrónico para luego distribuirlos desde ahí”, expresó.
Recomendaciones para compradores y vendedores
Porres agregó que, en el contexto actual de aranceles tan altos —que prácticamente pueden calificarse como un embargo comercial que hace inviable el comercio entre China y Estados Unidos—, espera que las fuerzas actúen por naturaleza, ya sea frenando la iniciativa de la administración Trump o incentivando el negocio de la paquetería desde China, “lo cual vemos menos probable por lo poco preparado que estaría este ecosistema”, enfatizó.
Entre las recomendaciones, Porres comparte la posibilidad de tener varios orígenes para importar productos, evitar manejar lotes grandes, orientarse a ciclos diarios de importación para ser dinámicos ante la incertidumbre, abarcar catálogos extensos con inventarios diversos para ofrecer una buena gama al consumidor y comercializar productos de distribuidores y comercios locales.
En esa línea, Pérez agrega que este tipo de medidas seguirán apareciendo, pero lo importante es tener el contexto para anticiparse y definir estrategias.
Por ejemplo, mencionó reforzar las capacidades de las logísticas locales.
También, competir por valor y no únicamente por precio. “Son de las cosas que las empresas deberían reforzar y voltear a ver productos locales”.
Además, consideró importante generar fidelización con el cliente, y, por último, mantenerse actualizado con las políticas comerciales de esos países que van a impactar la cadena de suministro, dado que el comercio electrónico no depende únicamente de tener un buen producto, sino también de entender el mapa global del abastecimiento, las necesidades del consumidor y qué es lo que se está moviendo en el mercado.
CONTENIDO PARA SUSCRIPTORES
“Hay que adaptarse con inteligencia, tener mucha data e información para generar alianzas”, concluyó Pérez.
Ardón agregó que es necesario verificar en la plataforma desde dónde será despachado o vendrá su producto; esto le ayudará a obtener mejor precio si viene en forma directa, que si pasa por EE. UU.
También puede comprar para tener una entrega desde la región que le corresponde a Guatemala, para que no impacte el precio.
“Como todo buen comprador, debo revisar en todas las plataformas disponibles dónde consigo el mejor precio. Se trata de hacer una buena búsqueda de mi producto, la calidad que quiero y el precio que estoy buscando”, añadió.
Por último, es posible que las plataformas busquen otros países de distribución, como Panamá, puntualizó.
Los paquetes procedentes de China, en especial aquellos que ofrecen productos baratos de los gigantes del comercio electrónico Shein y Temu, se verán afectados por aranceles punitivos en EE. UU. a partir del 2 de mayo.
Los bajos precios de Temu y Shein podrían cambiar en Guatemala por varios factores: estas son las recomendaciones
Los paquetes procedentes de China, en especial aquellos que ofrecen productos baratos de los gigantes del comercio electrónico Shein y Temu, se verán afectados por aranceles punitivos en EE. UU. a partir del 2 de mayo.
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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó el decreto para cobro de aranceles a productos menores de US$800 provenientes de China el 2 de abril del 2025 y estableció que el fin de esa exención comenzó el 2 de mayo. (Foto, Prensa Libre: Shutterstock).
En el marco de un conflicto comercial global, Estados Unidos decidió poner fin a una exención arancelaria para paquetes procedentes de China y Hong Kong con un valor de hasta US$800, un mecanismo que ha permitido la expansión de los gigantes chinos del comercio electrónico en Estados Unidos, como Temu y Shein.
En opinión de Mario Porres, fundador y gerente de la plataforma de comercio electrónico GuatemalaDigital.com, los aranceles de Trump se reflejan en escasez y en el aumento de precios en muchos de los productos que el país importa a través de paquetería.
Por ejemplo, explicó que esta industria en Guatemala opera, en su mayoría, importando desde EE. UU. mercadería producida en China, por lo que los costos de aranceles que ellos pagan en las importaciones desde el país asiático son trasladados al cliente final.
Porres agregó que esta medida aplica a Guatemala al igual que a cualquier país del mundo, pero China es el principal afectado por la cantidad que exporta a EE. UU. en esa modalidad.
Por lo anterior, al consumidor en Guatemala le afecta no tener los mismos precios bajos que antes ofrecían Temu y Shein, ya que al pagar más impuestos en EE. UU., estos costos son trasladados al consumidor guatemalteco.
“Acá será interesante ver cómo evolucionan los intentos de Temu por incursionar en Guatemala, donde, a diferencia de EE. UU., no hay incentivos fiscales por traer menos de US$800 por paquete ni existe una paquetería barata desde China”, enfatizó Porres.
Jacobo Pérez, consultor de comercio electrónico y comunicación, consideró que la eliminación de esa exoneración hace que cualquier envío, por pequeño que sea, incurra en aranceles, y ese sobrecosto se ha trasladado inevitablemente a los guatemaltecos.
Esto va a afectar tanto a los consumidores individuales que pagan el precio de venta como a los revendedores locales que dependen de esos productos. “Esta medida afectará a esas pequeñas empresas que están trayendo productos de China, en este caso productos de varios lugares”, refirió Pérez.
Dos escenarios
Byron Ardón, gerente general de Codecominter, expone que, en términos prácticos, la orden ejecutiva firmada por el presidente Trump no deja claro si la suspensión de la exención para la paquetería inferior a los US$800 aplica a todo el mundo o si es exclusiva para China, Hong Kong o Asia. Si los aranceles quedan sin exención para todo el mundo, estos se aplicarán a los envíos que lleguen de cualquier país.
Consultado sobre el escenario en que la aplicación del arancel sea solo para los envíos desde China, y el comprador esté en Guatemala, dijo que hay dos escenarios. Además, se debe tomar en cuenta que para las importaciones de China a Estados Unidos los aranceles son del 145%.
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El primer escenario se refiere a que la mercancía venga de China, entre y se nacionalice en Estados Unidos, porque, por ejemplo, tenía que pasar por algún tipo de proceso antes de ser despachada a Guatemala.
En este caso, el importador en Estados Unidos tendrá que pagar el arancel que le aplique el gobierno para ingresar a ese país, y por defecto, ese cargo se agregará al precio del producto, por lo que este tendrá un valor más alto para traerlo a Guatemala; es decir, si antes lo compraba a cierto valor, ahora lo adquirirá con 145% más.
El segundo escenario ocurre si la mercancía entra en un área de zona libre o zona franca en Estados Unidos, lo que permite que el producto entre en tránsito aduanero y no pague impuestos de importación en ese país. Podría ser que entre en un régimen impositivo especial para que ahí sea procesado y luego despachado hacia donde se desee. En este caso, el producto mantendría su precio como si hubiera sido comprado en Europa, Asia u otro origen.
Al consumidor le conviene comprar directamente de China a través de las páginas o plataformas disponibles. Puede ser que el inventario esté en una zona franca o se lo despachen directamente desde China, y de esta manera consiga el mejor precio.
Porque, insistió, si fue nacionalizado en Estados Unidos y luego se despacha a Guatemala u otros países, el valor del producto ya incluirá el nuevo impuesto de arancel a China.
Analizar centros de distribución
El consumidor debe tomar en cuenta el origen de la compra, es decir, identificar desde dónde conviene más adquirir el producto.
Explica, por ejemplo, que en las plataformas de compra (como Temu o Shein) el consumidor puede observar de dónde vendrá o desde dónde será despachado el producto, también considerando la región.
En las plataformas se establecen los centros de distribución por regiones. Por ejemplo, en el caso de Temu, el centro que cubre a Guatemala es específicamente el de la región de México. También tiene otro establecido en América del Sur.
Explica, además, que desde México se distribuye hacia Centroamérica y, muchas veces, desde México hacia Estados Unidos, aunque Temu tenga su propio centro de distribución en ese país norteamericano.
Respecto a los productos que se traen de China, que pasen por Estados Unidos y que puedan tener agregado el arancel, considera que los más susceptibles son los electrónicos. Entre estos: teléfonos móviles, pantallas táctiles, tabletas, pantallas de televisión, radios, principalmente fabricados en ese país asiático para empresas estadounidenses; también hay otras europeas que mantienen mucho inventario en Estados Unidos.
Si un inventario ya está nacionalizado por los requerimientos mínimos del gobierno estadounidense, este tipo de productos es más susceptible de pasar por el territorio estadounidense y podría verse más impactado en cuanto al precio.
También resalta que algunas empresas usan como centro de acogida o distribución a Panamá, y desde ahí distribuyen a la cadena logística, aunque por ahora sea para negocios mayoristas. Pero cree que podrían buscar instalarse en esos lugares también para ventas minoristas.
“Porque al darse esta situación, en la que Estados Unidos está complicando y poniendo tantas barreras al comercio electrónico internacional, y era usado como centro de acopio y distribución, pueden pensar en otras áreas como Panamá, que cuenta con una zona libre, con leyes más flexibles y que puede servir para distribuir desde ahí. También está México”, agregó.
“Esa es otra tendencia que podremos estar viendo muy pronto: el cambio de los centros de acogida de estas grandes empresas de comercio electrónico para luego distribuirlos desde ahí”, expresó.
Recomendaciones para compradores y vendedores
Porres agregó que, en el contexto actual de aranceles tan altos —que prácticamente pueden calificarse como un embargo comercial que hace inviable el comercio entre China y Estados Unidos—, espera que las fuerzas actúen por naturaleza, ya sea frenando la iniciativa de la administración Trump o incentivando el negocio de la paquetería desde China, “lo cual vemos menos probable por lo poco preparado que estaría este ecosistema”, enfatizó.
Entre las recomendaciones, Porres comparte la posibilidad de tener varios orígenes para importar productos, evitar manejar lotes grandes, orientarse a ciclos diarios de importación para ser dinámicos ante la incertidumbre, abarcar catálogos extensos con inventarios diversos para ofrecer una buena gama al consumidor y comercializar productos de distribuidores y comercios locales.
En esa línea, Pérez agrega que este tipo de medidas seguirán apareciendo, pero lo importante es tener el contexto para anticiparse y definir estrategias.
Por ejemplo, mencionó reforzar las capacidades de las logísticas locales.
También, competir por valor y no únicamente por precio. “Son de las cosas que las empresas deberían reforzar y voltear a ver productos locales”.
Además, consideró importante generar fidelización con el cliente, y, por último, mantenerse actualizado con las políticas comerciales de esos países que van a impactar la cadena de suministro, dado que el comercio electrónico no depende únicamente de tener un buen producto, sino también de entender el mapa global del abastecimiento, las necesidades del consumidor y qué es lo que se está moviendo en el mercado.
CONTENIDO PARA SUSCRIPTORES
“Hay que adaptarse con inteligencia, tener mucha data e información para generar alianzas”, concluyó Pérez.
Ardón agregó que es necesario verificar en la plataforma desde dónde será despachado o vendrá su producto; esto le ayudará a obtener mejor precio si viene en forma directa, que si pasa por EE. UU.
También puede comprar para tener una entrega desde la región que le corresponde a Guatemala, para que no impacte el precio.
“Como todo buen comprador, debo revisar en todas las plataformas disponibles dónde consigo el mejor precio. Se trata de hacer una buena búsqueda de mi producto, la calidad que quiero y el precio que estoy buscando”, añadió.
Por último, es posible que las plataformas busquen otros países de distribución, como Panamá, puntualizó.
ESCRITO POR:
Rosa María Bolaños
Periodista de Prensa Libre especializada en medios escritos y radiales en temas de energía eléctrica, empleo, impuestos, empresas y negocios con más de 20 años de experiencia.
Natiana Gándara Espino
ARCHIVADO EN:
Prensa Libre | Economía
